El ozono es un gas que se genera al aplicar una descarga eléctrica sobre el oxígeno (O2) presente en el aire (que está constituido por 2 átomos de oxígeno). Esta fuerza eléctrica hace que cada uno de estos átomos se separe uno del otro y se junte a los 2 de otras moléculas de oxígeno obteniendo un compuesto con 3 átomos de oxígeno que es el O3 (ozono).
El ozono es inestable y tiende a perder fácilmente ese átomo que ha captado provocando reacciones químicas con los microorganismos, lo que lo convierte en un poderoso desinfectante (agente oxidante) ya que, el Ozono destruye el ARN de bacterias, virus o microorganismos inhabilitandolos, produciéndose de esta manera la desinfección del medio.
Finalmente, debido a su carácter inestable, el ozono tras la desinfección se vuelve a convertir en oxígeno.
